La Biblia a libro abierto Febrero de 2004
		La Sagrada Familia

		La Sagrada Familia Mateo 1, 18 s., Lucas 1, 26-39 ; 2, 41-51 Bajo el nombre de "Sagrada Familia", la familia compuesta por Jesús, María y José se propone como modelo para la liturgia después de Navidad y para la espiritualidad familiar. ¿No hay en ello algo extraño pues, qué es exactamente esta familia? Los lazos familiares que los unen no son nada simples. María es la madre de Jesús, pero, las condiciones en las que lo ha engendrado son misteriosas. Es un ángel, Gabriel, es decir, alguien considerado como mensajero de Dios, el que anuncia a María este futuro nacimiento. ¿Este es el vector de lo que se llama púdicamente, "la sombra" del Espíritu Santo? a la pregunta de María: "¿Cómo será esto, pues yo soy virgen?", él le responde, seguro de sí mismo: "El Espíritu Santo te cubrirá con su sombra". Encontramos anunciaciones hechas por un ángel a Sara, la mujer de Abraham y madre de Isaac o a Isabel, prima de María, madre de Juan Bautista. Estas dos mujeres son estériles y han pasado la edad de tener hijos. Encontramos también en otras mitologías nacimientos virginales. En estos diversos casos, se trata de un procedimiento literario que significa que el niño que va a nacer así será un ser excepcional. ¿Qué pasó exactamente? No sabemos nada. ¿María es la madre portadora de un niño que tiene un origen no determinado o una madre soltera a la que José salva del deshonor? José está, en efecto, dispuesto a repudiar secretamente a María, a la que le unían ya los lazos del noviazgo, puesto que se encuentra encinta antes de que ellos hagan vida en común. Él no parece ser el padre biológico de Jesús.  Por la contra, es por él que se transmiten los lazos de descendencia, haciendo de Jesús un miembro de la familia de David. La adopción de Jesús por José parece entonces un hecho muy fuerte. Sus contemporáneos lo llaman: "Hijo de José " simplemente. María no está excluida de este tipo de filiación, pues José, en la genealogía que nos da Mateo (1,1 s.) de la ascendencia de Jesús, es llamado "el esposo de María". Se trata de un hecho a tener en cuenta en una cultura en que la mujer es generalmente identificada por el nombre de su esposo. ¿El niño lo sabe o tiene tan sólo la intuición de sus orígenes misteriosos? ¿En su adolescencia partió en búsqueda de su verdadero padre? ¿Sería esta la causa de su fuga con ocasión de la peregrinación a Jerusalén? Haciendo esto, en el contexto de esta búsqueda, Jesús puede también descubrir otra filiación, la que lo une a una trascendencia a la que él llama su Padre. Pero, sus padres no lo comprenden cuando él les dice que necesita "atender a los asuntos de su Padre ". Tras este episodio, se queda prudentemente en casa, se inicia en el oficio de José y lo ejerce hasta los 30 años. Los evangelios no nos dicen nada de las relaciones entre José y María. Podemos suponer que fueron gozosas. También podemos suponer que tuvieron otros hijos, pues los evangelios hablan de hermanos y hermanas de Jesús. Cuando María trae al mundo a Jesús, Lucas le llama "su hijo primogénito". Se ha traducido esta expresión por "hijo único", pero podría también hacerse por "hijo primogénito". Sea lo que fuere, en sus pocos años de vida pública, Jesús no valoró sus lazos de sangre: "¿Quiénes son mi madre y mis hermanos? El que hace la voluntad de Dios, ese es mi hermano, mi hermana y mi madre" (Mc 3,33-35) y "Quien ama a su padre, su madre, su hijo, su hija, (su mujer, en Lucas) más que a mí no es digno de mí" (Mt 10,37). ¿Relativiza los lazos familiares, o más bien abre estos lazos a otras relaciones? ¿No es ésta una salida de la familia cerrada para permitir a sus miembros -su madre, sus posibles hermanos y hermanas- nuevas relaciones y nuevas vocaciones? ¿Qué se puede deducir de tal lectura de la "Sagrada Familia "? Que no sólo existe un único modelo familiar, que una concepción fuera del matrimonio no es necesariamente un acto reprobable, que en el ser humano la adopción permite salir de la visión de lo completamente biológico que no es el único lazo posible entre padres e hijos, que, de diferentes formas de familia, pueden nacer hijos equilibrados, que la huída de un niño es incomprensible y motivo de angustia por sus padres, pero puede constituir una etapa esencial para él o aún que la familia nuclear cerrada sobre sí misma no favorece el desarrollo equilibrado de sus miembros. Aquí se encuentran, si no santificadas, al menos reconocidas todas las familias no conformes a la norma. Recordemos a las familias con un padre-madre solo, adoptivas, recompuestas, con hijos de diferentes parejas o también nacidas de concepciones asistidas médicamente.  Una vez más, los evangelios aparecen como rompedores de los moldes sociales listos para usar. Jesús se rebeló contra todos los lazos capaces de impedir la libertad del ser humano: lazos familiares como aquí, y también los sociales o religiosos.