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- Tres preguntas para
Jacques Gaillot
La cabezada de Zidane, en sentido
propio y figurado
el mundo entero lo comenta
¿Qué
opina Usted?
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Lamento que haya dado esa cabezada.
Zidane contestó a la violencia verbal con la violencia
física. A menudo eso es lo que ocurre en la vida cotidiana,
tanto a nivel individual como a nivel de los pueblos. Se responde
a la violencia con la violencia. Me hubiera gustado que Zidane
hablara con el que insultó a su madre y a su hermana.
¿Acaso no tenía que haberse esforzado por encontrarse
con el otro en lugar de combatirlo? |
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- Como en el 98, esta es una época
de blanc, black, beur -blancos, negros y norteafricanos (n.d.t.)-
que hace soñar a Francia y ha defendido sus colores con
toda honra. ¿Opina Usted que esto podría favorecer
la tolerancia en el país o si el "fuelle" se
va a deshinchar dentro de unos meses como ocurrió hace
8 años?
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El equipo azul nos dio la felicidad
de poder soñar, con esta convicción de que el futuro
es posible. Los franceses han plebiscitado a este equipo black,
blanc, beur, demostrando así su capacidad para enriquecerse
con la diferencia de los otros. |
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- La tolerancia es acogida y respeto
del otro. Sólo conseguimos ser nosotros mismos estando
junto a los otros, sin excepción.
El hecho de haber vivido esos momentos intensos nos ayudará
ciertamente a creer que el futuro no se hará sin nuestros
hermanos de la inmigración. ¿El futuro de Francia
y de Europa no es acaso el del mestizaje?
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- La copa del mundo de fútbol
es con toda probabilidad el evento que más se sigue en
el mundo. ¡Congrega para la final a cerca de los dos tercios
de la humanidad! ¿Le parece que esto sirva para algo?
¿El fútbol es el "opio del pueblo" o
puede conducir a una conciencia política, nacional o incluso
internacional?
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- Me parece prodigioso que la familia
humana pueda comulgara con el mismo evento. Gracias a los adelantos
de la tecnología. Yo me encontraba en Montreal para la
final. ¡El ambiente era excepcional!
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La gran saga del mundial no es un opio
para los pueblos. Permite la fiesta con reúne y el sueño
que abre las puertas del futuro. Les devuelve el orgullo legítimo
a los pueblos. Y, sobre todo, aprendemos a ser ciudadanos del
mundo, con una conciencia planetaria. |
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- Le contaba yo a un arzobispo africano
de paso por París: "me hubiera gustado que África
fuera vencedora del mundial". Me contestó sin dudarlo:
"mientras no tengamos apoyos financieros, no podremos ganar."
Declaraciones recogidas por
Olivier Galzi
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