Carta de Jacques Gaillot del 1 de Octubre de 2000

Los mártires de la miseria
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Los mártires de la miseria

Me cruzo en la calle con Abdeslam un joven marroquí que vive en las afueras de París. Quiere invitarme a un café. Estamos contentos de volver a vernos. A Abdeslam parece que las cosas le van bien: ahora tiene sus papeles, está casado con una francesa y espera felizmente un hijo.
Acaba de regresar de Marruecos adonde fue a visitar a su familia. Lo noto muy preocupado por los jjjóvenes que se encontró en su país. "Hoy más que nunca la juventud se siente atraída por Europa. Están dispuestos a cualquier cosa para poder ir. Ahora ya no piden los servicios de un "barquero" que les pide sumas astronómicas. Ellos mismos se organizan, fabrican barcas, encuentran una brújula, y de noche, ponen rumbo a España. En una de estas barcas habían subido quince. Desde entonces no volvieron a saber de ellos. Como tantos otros desaparecieron en el mar"...
¡Qué valor es de estos jóvenes para desafiar el peligro y marcharse así jugándose la vida!
"Valor, también una derrota. Cuando un país no puede quedarse a sus hijos, es una derrota. No es normal que los jóvenes tengan que salir de su país por culpa de la miseria. Cada noche, durante una travesía, hay desaparecidos. Yo les llamo "los mártires de la miseria".
Con frecuencia escucho reproches para los sin papeles. Me dicen con frecuencia: "¿Para qué se vienen a Francia si saben que lo van a pasar mal? Más vale que sean desgraciados en su tierra que desgraciados en la nuestra".
"Dentro de esta lógica, los que hablan así tienen razón a su manera. Incluso yo les digo a los jóvenes de Marruecos que venir a Francia va a ser muy duro para ellos. Pero hay algo más. Estos jóvenes no tienen esperanza quedándose en Marruecos. Ya no queda esperanza. El futuro está tapiado. Saben que si se vienen a Europa, si se pelean y buscan, encontrarán algo. Entonces, la diferencia es la esperanza".
Los 13 y 14 de octubre próximos, los ministros de interior de los Quince van a reunirse en Biarritz oficialmente para preparar un Carta europea de los Derechos Humanos. En realidad, será un paso adelante hacia la construcción de la Europa bastión.